Desarrollan nuevo material a partir de las botellas plásticas

La iniciativa a cargo del investigador Humberto Palza, académico de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas, busca transferir la tecnología a los recicladores de base, para que generar un modelo de negocio inclusivo, y de ahí llegar a la industria de la construcción.

Humberto Palza, académico FCFM.

El Tereftalato de Polietileno, también conocido como PET, es un plástico 100 % reciclable y utilizado principalmente para la elaboración de botellas. Solo en Chile se utilizan unas 55 mil toneladas de este plástico por año, pero un muy bajo porcentaje se recicla.

El profesor del Departamento de Ingeniería Química, Biotecnología y Materiales, Dr. Humberto Palza Cordero, lidera el proyecto “Resina de poliéster insaturada obtenida desde residuos de botellas PET para preparación de fibras de vidrio y otros materiales compuestos”, propuesta a través de la cual busca darle valor a este material, aportar nuevos materiales a la industria de la construcción y apoyar a los recicladores de base.

Según plantea el proyecto “busca valorar los residuos de las botellas de PET mediante una tecnología basada en el reciclaje químico, donde el PET es transformado químicamente para obtener una nueva resina de poliéster insaturado, la cual se utiliza para hacer fibras de vidrio”.

También puede dar vida a una resina aglomerante para generar materiales con otros residuos, por ejemplo, partículas de neumáticos.

Aportando a la economía circular

El académico relata que las botellas de PET tienen una baja tasa de reciclaje dado que no existen tecnologías que puedan darle valor, agregando que este bajo valor hace en particular que los recicladores de base no tengan un incentivo para reciclar este material.

“La tecnología que se está desarrollando le da un valor agregado al residuo PET, al transformarlo en una resina que tiene un precio de venta mucho mayor. De esta manera, se estimulará el reciclaje PET al generar un estímulo a los recicladores de base, quienes están involucrados en este proyecto”, detalla Palza.

Por otro lado, este trabajo aportará ala economía circular, ya que de las muchas estrategias que se pueden seguir para fomentar la economía circular, el reciclaje químico de materiales plásticos es una de las más eficientes.

Esto último, “dado que utiliza un residuo plástico que fue diseñado para un uso de corto tiempo (botellas de agua), para generar un nuevo material que será utilizado en aplicaciones de largo plazo (fibra de vidrio). De esta manera, se reemplaza una resina de origen fósil por una resina que usa un residuo plástico”.



Por Valeria Osorio Ureta, Comunicaciones OpenBeauchef

valeria.osoriou@uchile.cl