Por Alejandro Pantoja, Director Ejecutivo de OpenBeauchef
Las crisis por cierto son problemáticas para las sociedades, pero al mismo tiempo abren múltiples oportunidades. Las denominadas «Green Tech» o «tecnologías verdes», emergen como una respuesta esencial desde la innovación y el emprendimiento tecnológico, para enfrentar la crisis climática. Las Green Tech engloban un espectro amplio de tecnologías y startups dedicadas a mitigar el impacto negativo de la actividad humana en el medio ambiente: desde la generación de energías renovables hasta la gestión de residuos y la promoción de procesos sostenibles, estas innovaciones tecnológicas ofrecen una perspectiva transformadora para nuestro futuro.
El término Green Tech se utiliza como un paraguas que engloba a las Climate Tech o tecnologías para abordar el cambio climático y Clean Tech o tecnologías limpias. En general se incluyen entonces, todas las tecnologías focalizadas en eficiencia energética; en generación de energías alternativas y renovables como la solar, la eólica y los biocombustibles; en tecnologías para reducir la contaminación, reducción en las emisiones de gases de efecto invernadero, los residuos y otros impactos ambientales negativos.
El crecimiento sostenido de las tecnologías verdes no solo es indicativo de la creciente conciencia global acerca de la necesidad de abordar el cambio climático, sino también un testimonio de las oportunidades que abre para el ecosistema de I+D+i+e. Las startups que se crean en este ámbito están experimentando un desarrollo acelerado, lo que refleja la demanda creciente de soluciones sostenibles y la inversión significativa en este sector. Según el estudio realizado por Future Market Insights, se proyecta que el mercado Green Tech alcance una cifra superior a los 122 millones de dólares para el año 2032. Este aumento anual del 22.4% entre 2022 y 2032 representa una clara indicación de que la sociedad está preparada para acoger una revolución verde. La inversión en startups de tecnología limpia (Clean Tech) y aquellas orientadas a la agricultura (agtech) ha experimentado un notable incremento durante el año 2022, registrando un incremento del 912% en inversiones destinadas a estos sectores.
Para el desarrollo de las Green Tech, el avance tecnológico es una fuerza motriz clave y las universidades cumplen un rol esencial en este propósito. Orientar la investigación aplicada y el desarrollo de innovaciones hacia desafíos “verdes” relacionados con nuevos materiales sostenibles, tecnologías para la generación de energía renovable, sistemas de almacenamiento energético, tecnologías para captura de carbono, etc. es clave, así como la colaboración con la industria y las startups, que faciliten la aceleración de estas innovaciones y su efectiva transferencia y adopción en la sociedad. Si la falta de inversión ha sido un desincentivo para la creación de emprendimientos tecnológicos Green Tech, el creciente aumento de capital y oportunidades para el desarrollo y escalamiento de soluciones tecnológicas de impacto, y el potencial laboratorio que implica la diversidad de nuestro territorio, convierte a las Green Tech en el camino hacia un futuro más sostenible y próspero.