[:es]Sagradamente, el ingeniero y profesor de la FCFM Raúl Uribe se reúne cada semana con un equipo de emprendedores para «mentorearlos», es parte de su quehacer como avatar en OpenBeauchef.
En estas sesiones, hacen un análisis del proyecto. El profesor Uribe los llama a salirse de las estructura que tienen y los invita a visualizar -pizarra y plumón en mano- qué es lo que percibe el potencial cliente, cómo es el mercado, cuál es el real dolor, cómo escalar para producir impacto, entre otras cosas. En el fondo, el llamado es a hacerse preguntas importantes.
Este ingeniero civil industrial con magister en Gestión y Políticas Públicas trabajó en el mundo privado, fue emprendedor (por más de 25 años) y ahora se dedica a la docencia, algo que para él es tremendamente gratificante, porque, según admite, hoy su vocación es transferir conocimientos y experiencias. Es lo que hace también en OpenBeauchef, desde que fue invitado en 2015 a incorporarse como avatar o mentor.
¿Qué lo motivó a integrarse al programa Avatar de OpenBeauchef?
Yo trabajé mucho tiempo en el mundo privado y me di cuenta que hay una vacío significativo entre la academia y la industria, que muchas veces corren por rieles separados, a veces paralelos, a veces convergentes. Lo ideal es que haya una compenetración mucho mejor.
¿A qué cree que se debe esta poca comunicación entre academia e industria?
Los incentivos en las universidades están muy orientados a la publicación de documentos, a los papers; los investigadores buscan la ciencia por la ciencia, por la verdad y no siempre hay una coordinación con las necesidades que tiene el mundo de la industria. Yo creo que la función del avatar es construir parte de este puente, que conecta al mundo real con el mundo académico.
¿Cómo ha sido la experiencia de construir ese puente en OpenBeauchef?
La compensación es la satisfacción personal de poder ayudar a grupos que quieran emprender, que quieran transformar sus ideas en proyectos y finalmente verlos tener éxito, cumplir con sus sueños. Creo que hay mucho por transmitir; por el otro lado, es necesario gente que tenga ganas, hambre de recibir estos conocimientos y experiencias.
Al terminar esta entrevista, que fue realizada después de una de sus reuniones con equipos de emprendedores, el profesor Uribe aclara: «Yo me voy con el corazón llenito, me voy en general muy contento, porque siento que contribuyo en forma efectiva y que es bien recibido».[:]