LUN/4 de septiembre de 2016/Fancisca Orellana
“Buscamos que cada persona se sienta empoderada con las prótesis que tienen, y para eso las creamos con el diseño y color que quieran”, dice América Silva, co fundadora de TakeaHand, startup que fabrica piezas ortopédicas en impresoras 3D.
El diseño y su colorido no son los únicos elementos destacados ya que el precio también llama la atención, siendo hasta tres veces más baratas que las tradicionales. “El precio de partida es un millón de pesos. Actualmente, trabajamos en un centro de rehabilitación de Maipú donde las entregamos con un 50% de descuento y con pago en tres cuotas. La idea es ser parte de un movimiento de colaboración”, agrega Silva.
Este emprendimiento partió en enero de 2016 y en lo que va del año ha apoyado con prótesis a 25 familias. “Nuestra meta es desarrollar 1.000 unidades para fines de diciembre. Lo que más hacemos son prótesis para brazos, bajo codo o las que van bajo la rodilla, que vienen con articulaciones que permiten llevar una marcha natural a diferencia de los pies tradicionales que son rígidos”, explica América.
¿Cuáles son los próximos planes? Si bien el centro de operaciones está en Chile, la idea es abrir filiales en México y Colombia. “Por eso necesitamos levantar US$100.000 de capital, con el objetivo de que más gente nos conozca”, cuenta.
Un paso importante en esa línea será la visita que hará Silva a Israel a fines de septiembre, luego de ganar la final en Chile del Concurso Internacional Start Tel Aviv 2016, organizado por la Embajada de Israel en Chile y apoyado por Corfo. “Es un honor representar a las mujeres de Latinoamérica en este evento y poder conectarme con inversionistas que puedan apoyarnos”, afirma.