En la comunidad José Painecura Hueñalihuen, ubicada en la Región de La Araucanía, se encuentra instalado el piloto experimental desarrollado por un equipo de la Universidad de Chile y la Universidad de la Frontera. Este proporciona energía y agua a los habitantes de la zona.
La escasez hídrica es uno de los efectos del cambio climático. Chile, a lo largo y ancho de su territorio, no está al margen de esta problemática que, hoy, tiene a ocho regiones del país con decreto de emergencia agrícola. Entre ellas se encuentran Coquimbo, Maule, O´Higgins, Valparaíso, Los Lagos, Biobío, Ñuble y parte de la Región Metropolitana.
La búsqueda de soluciones ante este contexto adverso involucra a diferentes actores, entre ellos, la academia.
La Dra. Doris Sáez Huechipan, académica del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Chile e investigadora del Instituto de Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI), lidera el proyecto “Sistema de gestión de energía y agua para el desarrollo productivo de comunidades rurales”, con el cual busca aportar soluciones.
Para ello, actualmente se encuentran trabajando con la comunidad José Painecura Hueñalihuen, de origen lafkenche, quienes los han recibido de muy buena manera y participan activamente cada mes cuando el equipo les da a conocer los avances de la iniciativa. Un lazo que los ha llevado a participar también en conferencias, talleres y capacitaciones en ambas universidades.
Según explica la docente la realidad de las comunidades rurales indígenas del país- en general- tienen condiciones privilegiadas para la producción de energía renovable no convencional.
“Para estas comunidades, son recomendables las micro-redes que se definen como sistemas de abastecimiento energético a pequeña escala que están cercano a los puntos de consumo, y que combinan dos o más fuentes de energía renovable (fotovoltaico, eólico, hidráulica, biomasa, entre otros). Por otra parte, en varias de estas comunidades rurales existe escasez hídrica que se ha agudizado en estos últimos años”, revela la investigadora.
Escasez hídrica: un duro golpe
Respecto a los principales inconvenientes que se les presentan a estas comunidades y cómo estas definen su desarrollo productivo, la científica de la FCFM plantea que “la escasez hídrica afecta incluso al consumo de agua potable y sobre todo a la agricultura de estas comunidades, que a veces la consideran solo de autoconsumo”.
Es por este motivo, que desde el año 2020 se encuentran implementado un sistema de gestión de agua-energía, que consiste en un invernadero alimentado de energía solar como piloto.
“En este sistema se está implementando una estrategia de control predictivo basado en inteligencia computacional (IC) para optimizar ambos recursos, en especial el agua dada la escasez de este recurso en esta zona y en otras comunidades rurales. Para este sistema, se está implementando una estrategia de control en tiempo real, que incluye el desarrollo de modelos de predicción basados en Redes Neuronales y Lógica Difusa (Int. Computacional) para las condiciones climáticas, generación solar y consumos hídricos y energéticos”, enfatiza.
Este prototipo experimental que integra el sistema de gestión de energías renovables a un sistema de gestión de agua considera requisitos de riego para maximizar el beneficio obtenido por el cultivo de productos agrícolas, sin poner en riesgo el suministro de agua futuro y minimizando los costos energéticos producto del bombeo de agua.
A la fecha, en este sistema de agua-energía se han instalado los paneles solares para la operación de las bombas de alimentación a los estanques que permiten el riego del invernadero. Se está implementado la instrumentación para el control basado en el Internet de las cosas (IoT), y construyendo el invernadero.
El equipo, además, está conformado por los profesores Carlos Muñoz Poblete y Juan Ignacio Huircan, del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la UFRO; los estudiantes del DIE U. de Chile Álvaro Endo, Matías Alegría y Daniela Lasso, y Fernando Manríquez (UFRO). A ellos se suman los profesionales Martina Casanova (Ing. Agrónoma) y Sebastián Parra (Ing. Eléctrico).
Esta iniciativa es financiada por un proyecto impacto del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI).
Por Valeria Osorio Ureta, Comunicaciones OpenBeauchef
Correo: valeria.osoriou@uchile.cl